Gente del mundo creo que éramos varixs lxs que esperábamos este disco. Udol han publicado el pasado viernes 7 de abril un larga duración al que han llamado “El Regne”. El dúo de doom de alto contenido épico formado por Adrià (voces y batería) i Joan (alias Roque, guitarras) nos deleitan con varios formatos y diferente merchandising la mar de interesante que podréis encontrar en su plataforma Bandcamp. Este último trabajo lo han publicado conjuntamente con diferentes sellos independientes: Nafra Records, CKUD, Error!Music y Nomen Records. Las pistas fueron grabadas en Guisla Studio, mezcladas por Enric Verdaguer y masterizado por Arthur Rizk.
Permítanme por favor que me ponga tontorrón por un momento para conceptualizar esta banda dentro de mi vida. Yo soy de Lleida, esa ciudad con niebla que nadie conoce al oeste de Cataluña. Hace unos años me mudé a esta ciudad en parte por el trabajo, pero también por no parar de viajar a Barcelona para ver actuaciones. Yo buscaba esa escena underground que englobaba el doom, el stoner y el psych que por aquel entonces, en 2016 me tenían ya cautivado. Como patán recién llegado a la ciudad, me fui a ojos cerrados a ver a esta bandaza, y esa fue la primera de muchas noches memorables en esa mítica sala, la Rocksound.

Volviendo al tema, en setiembre de 2022 pude volver a disfrutar de un directo suyo en la sala VOL junto a Malammar y madre mía, estas bandas son poca gente, pero no tengo la sensación de que me falte grosor sonoro. Fue una experiencia auditiva importante, Udol tocaron perfectamente y Adriá mientras presentaba el siguiente tema, uno que pertenece a este último trabajo, argumentó: – Ja n’estem farts d’aquest disc!! – refiriéndose a su antiguo trabajo con una sinceridad y sentido del humor que despertó mi más amplia simpatía.
Este 10 de febrero publicaron el single del disco, El Regne, un temazo de más de 6 minutos que me dejó, como era de esperar con ganas de más. Son unos animales pesados, realmente más heavy que otras bandas que he escuchado con más del doble de componentes. Las frecuencias y afinaciones bajas me corrompieron hace unos años y ahora son religión para mí, así que esta banda me gusta, joder lo confieso. Y evidentemente no voy a fallar a su evento este 22 de Abril en la Sala Upload junto a Santa Creu y Bóveda del Sol. Necesito volver a estudiar la pedalera de Roque, que en esta ocasión es una especie de nave espacial de comunicaciones con dos alas.
El primer tema del disco (La Història…) se trata de una introducción a modo de poema y el segundo tema es el single, tema muy bien parido. Así que me metí con el tercero, El Pacte. Me gustaron las harmonías que trabajan y la capacidad vocal de Adrià, que encima toca mientras canta como si caminara. Empiezan el tema con una suave introducción para luego reventarte con riffs oscuros, puro despliegue de fuzz. El sonido crudo de la guitarra me tiene cautivado y me convence mucho como machacan el beat. Me encanta el uso de loops mientras van modulando de nuevo a sus riffs. Recuerdo el efecto hipnotizante de la parte final del tema durante la primera escucha, esa maravillosa sensación de tubo sonoro.

En Destí Fatal nos brindan un pequeño descanso con un pequeño interludio explicativo de la historia, una musicada oda pagana a la muerte. Y es que en Ombres nos transportan a ese estupor natural del momento anterior a una tragedia. Trabajan bien los tempos lentos y la pesadez también durante los licks más suaves de guitarra. Este tema me encaja perfectamente a esta altura del disco. Es un momento muy épico de la historia que nos explican. Ye me gustaría decir que es extraño como pega de bien este sonido doom gargero con las voces, y es que este dúo tiene, aparte de buenas ideas, mucha personalidad. No sé cómo explicarlo, pero no se trata de un sonido clásico, aunque cuando hablamos de estos estilos no tengo muy claro qué sería un sonido clásico.
Y tras este temazo larguísimo, otro de la misma índole que deja bien alto el nivel del disco, al menos para mí. L’incendi empieza por todo lo alto con unos riffs impresionantes y estos malditos tocaron mi corazón y me hicieron mover fuerte la melena. Me transportaron al fuego mismo del infierno, creando una conexión el inframundo y las fauces del planeta con la curda superficie. Se trata de un pedazo de viaje doom en el que contextualizan el ataque del agresor del reino y de veras que consiguieron que lo viviera justo así. Me gustan mucho las texturas y las distorsiones que usan, me suena mega aplastante y me gustan definitivamente sus arreglos, igual que las voces. Contiene todo lo que yo considero que es Udol en su estado “puro. Demuestran que con menos a veces se dice mucho con esos interludios drone. Otra vez caí en el abismo de la visión tubo y ahí fue cuando le otorgué a este último tema la distinción de predilecto. Encima se arrancan con un maravilloso solo de guitarra al final del tema que considero de mucho gusto. Me quedé bien satisfecho con este disco, creo que hasta me removieron emocionalmente un poco durante esas partes más lentas. Nada hay más terapéutico que un sofá unos altavoces y doom a todo volumen.
Si hasta el momento no os he convencido, pillad la entrada a ciegas para el 22 de abril y os venís, no hay mucho que discutir si leíste hasta la última línea.