Noche espectacular la vivida en la sala Estraperlo de Badalona el último viernes 21 de octubre. Con un aforo rozando el lleno total, se presentaron los catalanes Ósserp como cabezas de cartel de su ansiado regreso a los escenarios, después de haber editado su último lp “Els nous cants de la Sibil-la”, sucesor de la magnífica lección de Grindcore que fué “Al meu pas s´alça la mort” del ya lejano 2017. Se esperaba que fuera una fecha para la historia, porque esa misma noche estaban programadas las actuaciones de cuatro bandas soporte, entre legendarias y nuevas propuestas del género extremo.

Arrancaron puntuales los DENTELLADA, power trío de Death/ Crust (guitarra, batería y voz) que nos sirvió el aperitivo para la gran fiesta que se avecinaba. Los barceloneses cumplieron con su cometido, nos regalaron a los tempraneros una buena dosis de caña extraída de sus hasta ahora tres álbumes editados, pero que se recibió tibiamente por la falta de más público, o de cervezas.

Seguidamente enchufaron el dúo de Death/groove/sludge MUTANT SLUG, que aún sin material editado, nos dejaron una buena tanda de trallazos durante sus treinta minutos de soberbia actuación, adobando el ambiente para la siguiente banda, unos de los platos fuertes de la velada.

A las 22:10 puntuales se escuchó por los altavoces la clásica intro respiratoria de los franceses PULMONARY FIBROSIS, banda legendaria de Goregrind que ya desde el arranque nos tiró con metralla rápida y furiosa, que prácticamente el aforo al completo no dejó de festejarla de principio hasta el final del show. Con semejante repaso a su extensa discografía repleta de clásicos que se sucedieron uno tras otro y la soberbia actuación de su frontman no quedó duda de porqué siguen siendo una de las mejores bandas europeas del género, que aún persisten editando material y tocado por medio mundo underground desde 1998. Pogo nivel Dios!!

Tocaba acomodarse el cuerpo dislocado unos veinte minutos antes de que ÓSSERP, los cabeza de cartel, salieran al escenario. Fuera de la sala, durante el intermedio, los comentarios ansiosos sobre la vuelta de la banda a los escenarios y lo satisfecha que estaba la peña con el último disco (discazo, by the way) hacían presagiar una actuación memorable. 23:10 pm del viernes 21 de octubre de 2022 y pude ser testigo de una total entrega por parte de la banda a su público devoto y la devolución en forma de pogo, mosh, gritos guturales a vena hinchada y a nucazo limpio. Se corearon cada una de las descargas que escupieron los altavoces del recinto durante los cuarenta y cinco minutos de la brutal actuación, dejando en claro que ÓSSERP ya puede ser considerada el estandarte vernáculo indiscutible del género Death/ Grind (por cierto, cantado a dúo en catalán)

Acabada la actuación del plato fuerte de la velada, nos quedaba trasnochar con los vascos MUTILADED JUDGE, banda de la que no tenía referencias y que me recomendaron quedarme a verles porque “son algo especial”. Las luces se apagaron y sonó eurotecno bacalao que estalló de repente en luces estridentes y grindcore pregrabado con un aporreo incansable a un bajo de cinco cuerdas (único instrumento presente sobre el escenario) y berreos ininteligibles. Dos performers sobre el escenario. Digo performers porque la actuación fue sucia, desprolija, anárquica, tan visceral y maravillosamente catártica y divertida, cercana al “Teatro de la Crueldad” del que hablaba Artaud o que practicaron otros performers extremos como san Iggy Pop o GG Allin, que no puede obtener otro calificativo que de Arte Moderno.